#NachoMartínez - ¿Qué hará Teruel Existe?

¿Qué hará Teruel Existe?

Nos acercamos a unas elecciones municipales y autonómicas en el conjunto del Estado, quizá, sean las más inciertas en cuanto al resultado en las distintas comunidades autónomas y municipios. Esta incertidumbre general, tiene en Aragón un elemento distinto, un factor político que puede resultar decisivo, se trata de Teruel Existe.

Los resultados obtenidos por esta fuerza política en los últimos procesos electorales pueden calificarse como un éxito rotundo. Convirtiéndose en la primera opción electoral en la provincia en las elecciones generales de 2019. Y todo apunta a que esa dinámica puede continuar, incluso pueden mejorar en mucho los resultados obtenidos.

La pregunta es clara. ¿qué hará Teruel Existe en la investidura? No es fácil responder a esta pregunta, no sé sí la propia organización tiene una posición al respecto.

Un poco de historia económica

Teruel Existe, surge en 1999 apareciendo con fuerza en la movilización social. Era una fuerza apartidista que reclamaba y reclama, un futuro para la provincia, consiguiendo unificar a miles de ciudadanos en torno a reivindicaciones sociales elementales. Trabajo, sanidad, educación, conectividad, infraestructuras, en resumen: lo mínimo para poder sobrevivir y frenar la diáspora constante en la provincia.

La lucha contra la despoblación que sufre la provincia es el eje en el que se unifican las reivindicaciones de los turolenses. En cualquier caso, Teruel Existe, despierta simpatías en amplios sectores de la población, convirtiéndose en un referente para la defensa de una vida digna y con servicios en las zonas despobladas.

Ya a finales del siglo XX participábamos de las políticas neoliberales, aquellas que pretendían la no intervención pública en la economía y dejar, en manos de la “iniciativa” privada la economía.

Con ese “liberalismo” económico, el proceso de concentración de la producción, los servicios y consecuentemente de población solo puede acentuarse. Si se pretende invertir dinero para rentabilizar la inversión obteniendo más dinero que el invertido, provincias enteras desaparecerán y en otras, toda la población se concentrará en su capital o núcleos urbanos más poblados.

Pero los dirigentes del sistema económico no solo pretenden invertir donde es posible obtener más beneficio, también pretenden tener menos costes asociados a la actividad económica, por lo que pretender pagar menos impuestos dejando a lo público sin capacidad para intervenir. Además, tratan de recuperar los impuestos por distintas vías: ayudas, beneficios fiscales, infraestructuras que les interesen, rescates, etc. Para todos estos planes, no está demás privatizar los servicios públicos para reducir costes y si es posible convertirlos en una forma de negocio.

El proceso de concentración de la población, ni es nuevo, ni es algo exclusivo del Estado español. Podemos afirmar, que es un proceso internacional que se lleva desarrollando hace más de dos siglos coincidiendo con la última época del feudalismo y la aparición del capitalismo. Las fuerzas productivas se concentran y también los servicios que necesitan esas fuerzas para soportar esa concentración. También en el campo vemos ese proceso, las nuevas tecnologías han concentrado las explotaciones agrícolas. Además, en los últimos años estamos viendo oligopolios que controlan la cadena alimenticia, con ejemplos tan deprimentes y poco sostenibles como las macrogranjas.



La clave: empleo y servicios públicos

Ya sé que la mayoría de los turolenses que se manifestaron no lo hicieron movidos por reflexiones sobre el sistema social y la fase de desarrollo del capitalismo en la que nos encontramos. Pero, es el contexto económico el que determina las políticas económicas. Con unos servicios públicos y empleos dignos, Teruel Existe no “existiría”, al igual que la despoblación nunca hubiera llegado a los límites en los que se encuentra la provincia.

Por tanto, Teruel no tiene ningún futuro mientras el paradigma del beneficio económico determine los presupuestos y las políticas públicas. La cuestión es si es posible cambiar este paradigma por otro en el que primen el bienestar social, la sostenibilidad ambiental, y una distribución razonable de las cargas y recursos que la naturaleza pone a nuestra disposición.

Lamentablemente, el debate de investidura no se dará en estos términos. En caso de que pueda optarse por dos candidaturas, tendremos un candidato que apuestará abiertamente por una economía liberal sin “matices”, y otro que en la práctica casi defiende lo mismo “matizado” con un leve barniz socialdemócrata. Teruel lleva malviviendo con esos dos tipos de política demasiado tiempo como para pensar que la solución a sus males pasa por cualquiera de las dos opciones. Desde el máximo respeto a Teruel Existe tendrán que elegir el mal menor y presionar para obligarlos a modificar alguna de sus prioridades.

Mal harían en pensar, que todo depende de la inclusión de este movimiento social y político en un gobierno. Con los presupuestos actuales y, la falta de recaudación y financiación autonómica, por muchos diputados/consejeros/concejales que tuviera Teruel Existe no se cambiaría la esencia de la política. El peligro de entrar en gobiernos es que las prebendas, sueldos y privilegios se dan desde el primer día, mientras que los beneficios sociales tardan mucho en llegar, si llegan. Esa situación podría provocar crisis internas y generar una nueva desilusión y cierto “descreimiento” de la política que poco ayuda al futuro de Teruel.

Para que Teruel tenga futuro es necesario transformar la sociedad, cambiar las prioridades y planificar la economía. Mientras se contribuye a esa compleja transformación, desde la movilización y la institución se pueden conseguir avances y conquistas, o evitar la pérdida de servicios públicos. No es estéril estar en las instituciones, y tampoco es fácil esa tarea que debe apoyarse en la movilización que es lo que ha convertido a Teruel Existe en una fuerza política importante, con la posible capacidad para decidir un gobierno y otro.

Teruel, ni ningún otro territorio más o menos poblados, tiene futuro por sí solo. Su lucha es la lucha de muchos, ya sea en las zonas despobladas o masificadas, es la lucha por sobrevivir con la dignidad que merece todo ser humano a estas alturas del siglo XXI.

Espero poder contar en esa lucha con compañeros de Teruel Existe, igual que cuentan conmigo para su lucha por un futuro para la provincia y sus pobladores.■

Nacho Martínez         

Militante IU-Zaragoza