España se enfrenta a una nueva crisis justo cuando las familias comenzaban a superar las peores consecuencias económicas y sociales derivadas de la pandemia. Durante la Covid, hemos demostrado que se pueden aplicar políticas públicas valientes para proteger a la ciudadanía en tiempos de crisis y, ante la incertidumbre que provoca el actual escenario, pensamos que es necesario aprobar un nuevo escudo social y verde que proporcione certezas a la gente, proteger su bienestar reforzando los servicios públicos y avanzando en nuevos derechos, y acelerar las transformaciones profundas que nuestro país lleva años postergando.
Quienes apuestan por una bajada de impuestos como única vía para reducir los costes de la energía y de los combustibles fósiles deberían también explicar a la ciudadanía qué carreteras dejaran de construirse, cuántos dependientes dejaran de percibir su prestación o si la Atención Primaria no podrá dotarse con ese 25% necesario para ofrecer la asistencia sanitaria que las gentes de nuestros pueblos merecen. Y aquí resulta importante recordar que los servicios públicos, los que nos igualan a toda la ciudadanía, se financian vía impuestos.
En Podemos creemos que el coste de esta crisis no puede recaer sobre la gente, sino que es hora de que las grandes empresas y las grandes fortunas aporten lo que les corresponde.
En 2021 las grandes empresas españolas que componen el Ibex 35 obtuvieron un beneficio neto conjunto de 58.543 millones de euros. Entre estas empresas, las grandes energéticas (Iberdrola, Endesa, Repsol, Red Eléctrica, Enagás y Naturgy) superaron los 10.000 millones de beneficio, cuatro veces más que los casi 2.500 millones del año anterior. Ellas han sido las grandes beneficiarias de los elevados precios del gas. Para paliar las consecuencias económicas de la invasión de Rusia es urgente desacoplar el precio del gas del mercado marginalista.
Podemos quedarnos con las solidarias recomendaciones de Josep Borrell y la hipocresía de la señora Ana Botín que, en un intento de mimetizarse con el pueblo, bajó un grado la calefacción de su casa, mientras su banco en 2021, obtenía un beneficio neto de 8.124 millones de euros. O podemos exigir algo tan democrático como que se cumpla el artículo 31 de nuestra Constitución, estableciendo un sistema tributario justo inspirado en los principios de igualdad y progresividad.
Sorprende ahora ver a Sánchez recorriendo Europa en búsqueda de apoyos para reformar el mercado eléctrico, cuando en Podemos llevamos mucho tiempo reclamando la intervención en el mercado energético y recibiendo una negativa por respuesta. Bienvenido sea.■
Marta Prades
Diputada Podemos Aragón
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