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| María Milián. Concejala IU Ayto. Alcañiz |
Despatologizando la diversidad
Apenas hace un mes, en plena celebración del Orgullo 2021 se producían avances sociales importantes muy esperados en nuestro país. Por fin, se formalizaba el anteproyecto de la Ley Trans y LGTBI con su aprobación en el Consejo de Ministros y Ministras. Aunque queda un largo camino por recorrer hasta su aprobación definitiva, es un gran avance legislativo para el colectivo Trans y LGTBIQ+.
El pasado sábado, en Alcañiz se celebraron unas jornadas “Orgullo Educo-Rural” donde tuvimos la suerte de contar con diferentes personas de distintos colectivos LGTBQ+, entre otras Carla Antonelli. Se convirtió en un espacio de reflexión en el cual nos explicaron la realidad que viven en su día a día en ámbitos como el laboral, el educativo o en sus relaciones sociales. La actriz y sobre todo referente histórica en la defensa de los derechos LGTBIQ+ nos explicó lo importante y necesario que es esta ley Trans. Después de escuchar su relato tengo claro que esta ley es una conquista que lleva mucha lucha detrás y que las personas que la han impulsado no se han rendido jamás, ni lo van a hacer. Son un ejemplo a seguir porque poco a poco han empoderado su lucha, a pesar de que han sido el blanco de todas las críticas durante los últimos meses. Nos decía Carla que no entendía que 50.000 personas se hayan convertido en una cuestión de Estado todo este tiempo. Y la verdad es que una reflexiona y no entiende cómo a estas alturas en pleno siglo XXI, los derechos humanos se conviertan en debate de Estado.
Afortunadamente la despatologización de la transexualidad y su eliminación de los manuales sanitarios y psiquiátricos ha llegado, pero llega muy tarde. El reconocimiento de un derecho tan básico como es la autodeterminación de género sin informes médicos ni psiquiátricos implica que dejen de tratarlas como enfermas. Porque no lo son, simplemente forman parte de la diversidad humana.
Es imprescindible continuar por este camino para implementar el mayor número de medidas que garantice la igualdad real y efectiva.■
El pasado sábado, en Alcañiz se celebraron unas jornadas “Orgullo Educo-Rural” donde tuvimos la suerte de contar con diferentes personas de distintos colectivos LGTBQ+, entre otras Carla Antonelli. Se convirtió en un espacio de reflexión en el cual nos explicaron la realidad que viven en su día a día en ámbitos como el laboral, el educativo o en sus relaciones sociales. La actriz y sobre todo referente histórica en la defensa de los derechos LGTBIQ+ nos explicó lo importante y necesario que es esta ley Trans. Después de escuchar su relato tengo claro que esta ley es una conquista que lleva mucha lucha detrás y que las personas que la han impulsado no se han rendido jamás, ni lo van a hacer. Son un ejemplo a seguir porque poco a poco han empoderado su lucha, a pesar de que han sido el blanco de todas las críticas durante los últimos meses. Nos decía Carla que no entendía que 50.000 personas se hayan convertido en una cuestión de Estado todo este tiempo. Y la verdad es que una reflexiona y no entiende cómo a estas alturas en pleno siglo XXI, los derechos humanos se conviertan en debate de Estado.
Afortunadamente la despatologización de la transexualidad y su eliminación de los manuales sanitarios y psiquiátricos ha llegado, pero llega muy tarde. El reconocimiento de un derecho tan básico como es la autodeterminación de género sin informes médicos ni psiquiátricos implica que dejen de tratarlas como enfermas. Porque no lo son, simplemente forman parte de la diversidad humana.
Es imprescindible continuar por este camino para implementar el mayor número de medidas que garantice la igualdad real y efectiva.■
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